✨Leche dorada casera: abrigo para el alma
Hay días en que el cuerpo pide abrigo, pero no solo del que se lleva puesto. En esas tardes fresquitas, cuando la pausa se vuelve necesaria, esta leche dorada es mi ritual preferido. ¡Calienta, reconforta y es nutritiva!
🌿 Ingredientes:
1 taza y media de agua tibia
1 cucharadita de cúrcuma molida
1 pizca de canela
1 pizca de pimienta negra
1 cucharadita de aceite de coco (opcional, pero muy recomendado)
🫖 Preparación:
En una licuadora, dejá en remojo el coco rallado con el agua tibia durante 15 minutos.
Licuá todo por 1 o 2 minutos hasta que se vea bien integrado.
Filtrá la mezcla usando una bolsa de tela o lienzo para obtener tu leche vegetal.
Pasala a una ollita, agregá la cúrcuma, canela, pimienta y el aceite de coco.
Calentá a fuego suave, revolviendo con amor. No dejes que hierva.
Endulzala a gusto (opcional): podés usar stevia casera (2 o 3 gotitas), un poquito de azúcar mascabo o miel si preferís algo más natural.
🌟 Tips que suman
El aceite de coco no solo le da untuosidad, sino que ayuda a que el cuerpo absorba mejor la curcumina, el principio activo de la cúrcuma (¡y uno de mis favoritos por todo lo que hace!).
Si te gusta con un toque picante y más cálido, sumale una pizca de jengibre rallado: digestivo, antibacteriano, antioxidante y super reconfortante.
¿No tenés coco? Usá leche de almendras, de nuez o de otra semilla. Todas funcionan genial como base.
🧣 Perfecta para días fríos
Esta bebida es más que una receta: es una pausa consciente. Ideal para esos momentos en que querés frenar, respirar hondo y reconectar con vos.
¡Ojalá te abrace tanto como a mí!
Con amor,
Meli
@estacionconsciente
